Las 13 personas vinculadas a la matanza de siete hombres en Ojo de Agua, Baní, no es suficiente, expresan con temor habitantes de la comunidad, que muestran respaldo al senador Wilton Guerrero, pero se niegan a opinar sobre la investigación que hizo la Policía
Baní. A 47 días de la matanza de siete personas involucradas en un cargamento de drogas y millones de dólares, en este municipio persiste el temor de hablar con medios de comunicación, aunque unos más valientes muestran su respaldo al senador Wilton Guerrero, quien mantiene su inconformidad con las investigaciones hechas por la Policía.
En la comunidad de Paya, donde residían los extranjeros que fueron sacados de su residencia y llevados a Ojo de Agua, donde fueron acribillados, nadie habla del caso.
La residencia que fuera propiedad del colombiano Darío Asencio Vargas (El Don), de 56 años, en la avenida Sánchez, ayer estaba custodiada por dos agentes policiales portando armas largas y radios de comunicación.
En la vivienda aún reside la ama de casa Mercedes Carvajal y el vigilante, que vieron cuando El Don y las demás personas asesinadas en Ojo de Agua fueron montadas en un camión para quitarles la vida.Cuando Carvajal, su esposo y una menor observaron la presencia de periodistas y fotógrafos de El Caribe se pusieron nerviosos.
En la comunidad de El Llano, donde reside el senador Guerrero, existen varias juntas de vecinos que respaldan al legislador, y aunque temen hablar por temor a represalias en su contra, expresan que las investigaciones aún no han llegado a su final.
La señora Iris Andújar, presidenta de la junta de Vecinos Manengo Ortiz, de la comunidad de El Llano, expresó que el caso de Paya afecta a los habitantes de toda la provincia.
“El principal problema es el de la denuncia del senador, porque es que se nos está dañando la juventud.
No estamos satisfechos con los resultados de las investigaciones que hizo la Policía, deben investigar más; hay que seguir atando cabos para llegar al final”, sostuvo Andújar.
Pidió a las autoridades hacerle caso a lo que dice Guerrero, quien aseguró, dice la verdad.
“El senador tiene el respaldo de toda la comunidad de Baní, pero hay gente que no se atreve a hablar porque tiene miedo a salir a la calle a decir lo que está pasando”, manifestó.
Consideró que en el expediente dado a conocer por la Policía no están todos los involucrados en el caso. En el hecho sobrevivió el nicaragüense Holly Gómez, quien ha contribuido al apresamiento de 13 personas.
juntas de vecinos no opinan
El presidente y vicepresidente de la junta de vecinos “Gregorio Luperón”, Nelson Soto y Willy Peña, se negaron a comentar el informe de la Policía, al expresar que no cuentan con la seguridad del senador Guerrero para exponer sus puntos de vista de manera pública.
Señalaron, empero, que las juntas de vecinos de la provincia firmaron un documento respaldando a Guerrero, pero decir “que las autoridades no han actuado, nosotros no podemos decir eso”.
Manifestaron que están esperando a ver lo que sucederá, pero sin emitir opiniones ni a favor ni en contra.
El temor es tan grande que cuando un periodista le pide a la gente su opinión sobre el caso de Paya, inmediatamente cambian de conversación o se van del lugar.
Peña y Soto se desligaron de la justica.
No localizables
Reporteros de El Caribe trataron ayer de entrevistar al obispo de la Diócesis de Baní, monseñor Freddy Bretón, pero en su residencia se informó que estaba para Santiago.
Trataron también de conversar con el general Francisco Abréu Montes de Oca, director de la Regional Sur Central de la Policía, pero pasada la 1:00 p.m. se informó que no había ido a su oficina.
El senador Wilton Guerrero tampoco estaba en su residencia.
fuente,el caribe
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