El líder libio, Muammar Al Gaddafi, fue asesinado de un tiro en la cabeza y el estómago, dijo este viernes un médico forense que examinó el cadáver, citado por la televisora árabe Al Arabiya. Esta versión contrasta con la del vocero del Gobierno legítimo, Ibrahim Mussa, quien aseguró la víspera que el expresidente había fallecido a causa de bombardeos de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y los disparos fueron ejecutados a su cuerpo ya inerte.
Identificado como Ibrahim por la cadena de noticias, el forense aseguró que Al Gaddafi recibió un disparo en la cabeza y el abdómen a quemarropa, tras ser detenido en las inmedicaciones de Sirte, su ciudad natal.
De lo anterior, dedujo el galeno, se deriva que fue una ejecución extrajudicial.
El vocero del Gobierno libio, Moussa Ibrahim detalló este jueves que Gaddafi murió a consecuencia de las heridas sufridas luego de que la caravana en la que se trasladaba fuera bombardeada por aviones de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN); y no por las balas de los rebeldes del Consejo Nacional de Transición (CNT).
Ibrahim informó que Al Gaddafi "se encontraba en un convoy conformado por varios vehículos. Los pilotos de los aviones asesinos de la OTAN bombardearon ese convoy. El vehículo donde se trasladaba el líder resultó afectado por el ataque y él fue herido gravemente", divulgó la agencia Algeria ISP.
La nota añade que "los traidores rebeldes lo trasladaron en una pickup a la ciudad de Misrata (este). El líder falleció en el camino. En ese momento los rebeldes le dispararon en la cabeza y en el abdomen para simular que había muerto por las balas de los rebeldes".
Moussa Ibrahim instó al pueblo libio a continuar en resistencia y recordó las palabras de Al Gaddafi en su último discurso: “deben continuar resistiendo incluso si ya no pueden escucharme más”.
Asimismo, el vocero del régimen de Al Gaddafi aclaró que Saif Al Islam, hijo y líder de la resistencia, permanece con vida.
Los miembros de la Alianza Atlántica y voceros de Gobiernos occidentales le instaron a entregarse.
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