José Manuel Castillo, director Noticias A Tiempo. Whatsapp: 8098160105, josemlct11@hotmail.com. Santiago, República Dominicana.

jueves, 14 de febrero de 2013

Altos costos del visado dificultan legalización de haitianos indocumentados


Fuente, http://www.lalupa.com.do/

La Dirección General de Migración calcula en RD$15,000 el costo para regularizar en el país a 
un trabajador temporero de Haití. Sin embargo, el sector agroempresarial asegura que el 
costo supera los RD$30,000. Ver PDF

La regularización del estatus de las personas de otros países que residen en República Dominicana, en función de los requisitos que establece la Ley de Migración y su reglamento, es un proceso que resulta particularmente complejo y costoso para los jornaleros haitianos en el país.

Hacer una entrada al territorio nacional sin la documentación requerida le cuesta a un ciudadano haitiano entre RD$3,000 y RD$4,000. “Yo pago a la guagua 3,500 pesos y ella traer a mi primo aquí, y si tengo dinelo, yo dale 100 o 200 pesos a la cefrone (militares del Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza)… pero ella entenderse con el chofer. Si yo pago, no pasa na”. A través de su testimonio, Louis Ogilo (nombre ficticio) narra la realidad cotidiana en el cruce fronterizo, que no ignoran las autoridades nacionales.

Si el primo de Ogilo –una vez trabajando aquí– decide regularizar su situación de manera individual le resultaría imposible. No cuenta con una carta de trabajo, ni con un certificado médico de su país de origen. Pero tampoco tiene garantía de seguro para cubrir gastos médicos. Estos son solo tres de los diez requisitos que establece el reglamento.

En lo que respecta al costo económico, la Dirección General de Migración (DGM) estima en alrededor de RD$15,000 el monto para cubrir todos los procedimiento de regularización del estatus migratorio de un trabajador temporero. Este cálculo parte de que el proceso se lleve a cabo solo bajo el régimen de contingente, donde el empleador asume toda la responsabilidad de los trámites.

Tras analizar cada uno de los requisitos de la citada ley, la número 285-04 del 15 de agosto de 2004, y su reglamento, las organizaciones que trabajan con migrantes haitianos consideran que esta normativa resulta inviable, porque no se aplica a la realidad migratoria del país.

Bridget Wooding, coordinadora de la organización Observatorio Migrantes del Caribe, advierte que al imponer tantas condiciones, lo que van a provocar las autoridades es que algunas personas recurran a utilizar aún más los métodos irregulares para mover esa mano de obra.

“Lo que nosotros hemos podido constatar es que las cosas potencialmente se complican con el nuevo reglamento”, sostiene Wooding. En su artículo 69 se establece que el “extranjero puede ser admitido bajo la subcategoría de trabajador temporero de manera individual, o como parte de un contingente”.

El informe sobre la Cuestión de la Migración Nacional en la República Dominicana señala que si bien el reglamento establece normas claras sobre el régimen para trabajadores migratorios, prevalecen los cuestionamientos sobre las posibilidades reales de que tanto los empleados como los empleadores puedan implementar los procedimientos para la admisión de trabajadores extranjeros, debido al elevado número de requisitos y la dificultad para cumplirlos.

En el documento se expresa la preocupación de que el régimen que contempla el reglamento para trabajadores migratorios inhiba la contratación regulada de mano de obra haitiana.

Los críticos del reglamento resaltan también que ya resulta irrelevante establecer normas enfocadas en un régimen de contingente, un sistema de plantaciones que ya no existe en el país. Consideran que hoy la mayor parte de los migrantes haitianos se encuentra en el sector informal, y tal como están establecidas las normas podrían quedar fuera de regulación.

De hecho, la propia DGM afirma que hasta el momento ninguno de los trabajadores haitianos se ha acercado de manera individual a regularizar su estatus migratorio.

Mientras tanto, se desconoce la cantidad de migrantes del vecino país; la Encuesta Nacional de Fuerza de trabajo (ENFT) 2011 los sitúa en 247,468.

Acuerdo con los empleadores

En junio del año pasado varias empresas iniciaron un proceso para agilizar los trámites de regularización de la mano de obra haitiana. Esta iniciativa es el resultado de un acuerdo firmado por la Dirección de Migración con la JAD y la Asociación Dominicana de Constructores y Promotores de Viviendas (ACOPROVI).

Hasta el momento se han presentado 181 empresas, con un total de 7,395 solicitudes. Pero sólo se han emitido 210 carnés o permisos de trabajo, mientras el resto está en un proceso de depuración.

Aunque firmó el acuerdo con Migración en representación del sector agroempresarial, Osmar Benitez, presidente de la JAD, expone que el reglamento establece una serie de requisitos que desde el punto de vista del empresario dominicano, aunque se trate de un mandato de la ley, son difíciles de cumplir. “Son muchos requisitos, son costosos, y en el caso particular de los ciudadanos haitianos hay una dificultad logística para hacerlo una realidad”, refirió.

Cuando habla de dificultades logísticas, Benitez se refiere a que muchos de los trabajadores indocumentados nacieron en el país y su situación debe ser regularizada con un procedimiento diferente. “Ellos no pueden ir a Haití a buscar un acta de nacimiento, porque no la van a encontrar”.

Otra de las complicaciones que cita es que hay trabajadores haitianos que no fueron registrados al nacer. Tienen que ir a su país, buscar abogados y esperar el fallo de un juez que ordene al Registro Civil que les emita un certificado de nacimiento.

El dirigente del sector agro empresarial estima en alrededor de RD$32,000 el monto para regularizar un inmigrante haitiano, a partir de los requisitos del reglamento. De todas formas, exhorta a los empresarios a que se acojan al acuerdo con la DGM para evitar la aplicación de las sanciones que establece la ley.

El artículo 132 de la Ley General de Migración consigna multas de cinco a 30 salarios mínimos (calculados en la actualidad a RD$7,500 al mes) contra los empleadores que contraten extranjeros ilegales o no habilitados para trabajar en el país.

Escasos resultados

El reglamento de aplicación de la Ley General de Migración fue aprobado en 2011 y aún no se observan cambios importantes en la política migratoria del Estado dominicano. El trasiego de indocumentados continúa su agitado curso, y así lo conforman estudios realizados por las ONGs.

En el Informe de la Cuestión de la Migración Internacional en la República Dominicana se hace referencia a una investigación sobre el tráfico de personas desde Haití hasta Santiago, que indica que el 42% de los entrevistados ingresó a través de puestos fronterizos oficiales, a pesar de no contar con los documentos necesarios para entrar al país.

Ese estudio, realizado en 2012 por el Centro de Formación y Acción Social Agraria (CEFASA) señala que el 78% del total de migrantes indocumentados había sido inspeccionado por autoridades en los puestos de chequeos, que lograron, no obstante, continuar su viaje.


El peaje por Dajabón

La senadora del oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD) por Dajabón, Sonia Mateo, dice que en la frontera el llamado peaje o cobro a los que cruzan de manera ilegal es una realidad conocida por todos

“El peaje es prácticamente lo que se da en la vida diaria. Pasan por el río de Dajabón que les sirve como puente a un 90%. La mayoría siguen para los demás pueblos del país, mientras que los demás se quedan en la frontera”, refiere.

La legisladora advierte a las autoridades de Migración “ponerle ojo a la frontera” y denuncia que militares del Cesfront incurren en la supuesta práctica de violar sexualmente a mujeres haitianas indocumentadas que atraviesan la línea divisoria. •

Gastos del procedimiento

La Dirección General de Migración (DGM) asegura que en el procedimiento de regularización de los trabajadores temporeros no se gastan más de RD$15,000, suma que detallan de la siguiente manera: RD$1,000 por acogerse al llamado Régimen de Contingente; RD$4,000 por el examen médico; RD$4,500 por el Carné de Trabajo. El organismo asume que en el resto del proceso sólo se invierte RD$5,500.

Sin embargo, Osmar Benítez, presidente de la JAD, asegura que empleadores gastan alrededor de RD$32,000, para regularizar el estatus migratorio de un trabajador haitiano, pese a que lograron una rebaja en los gastos que conciernen a Migración. Recuerda que un visado dominicano cuesta US$90 y US$85 el pasaporte. Además de los trámites relacionados con el acta de nacimiento, el documento de que no tiene antecedentes criminales y la garantía de seguro y repatriación, entre otros.

El padre Regino Martínez, de la organización católica jesuita Solidaridad Fronteriza, organización que acompaña a los trabajadores haitianos informales a través de la Asociación Solidaria de Obreros Migrantes de la Línea Noroeste (ASOMILIN), explica que han tenido que hacer acuerdos verbales con los diferentes organismos encargados de otorgar documentaciones a fin de lograr rebajas en los precios, incluyendo la Oficina del Registro Civil en Haití.

Martínez calcula los gastos del proceso de regularización en alrededor de RD$11,640, si los trámites se realizan a través del gremio que acompaña a los trabajadores haitianos informales, organizados en la ASOMILIN.

Conflictos en la frontera norte



El sacerdote Regino Martínez acompañó a los migrantes haitianos durante varios días. (Foto: Ricardo Rojas)

Todavía la semana pasada repercutía el conflicto relacionado con un grupo de obreros haitianos que tratan de retornar a territorio dominicano y a los que la Dirección General de Migración exige entrar en el marco de la legalidad.

La gestión de Michell Martely emitió un comunicado para negar informaciones que daban cuenta de que su Gobierno está cobrando el equivalente a 2,500 pesos dominicanos a los ciudadanos interesados en optar por un visado para viajar de manera legal a República Dominicana. Tramitar desde su país pasaportes y visados fue la exigencia que les hizo Migración a los obreros que se amotinaron en la frontera norte.

“Queremos dejar constancia de que, por el contrario, son los representantes de la Dirección General de Migración en los puestos fronterizos y en los aeropuertos quienes están exigiendo dicho pago, por lo que en ningún caso el Gobierno de Haití está desfavoreciendo a sus conciudadanos en su gestión para ser poseedores de una visa dominicana”, indicó.

Desde principio de este año el sacerdote católico Regino Martínez acompañó a 1,080 obreros haitianos que montaron vigilia en “Tierra de Nadie” entre Quaminthe y Dajabón, para presionar a las autoridades dominicanas a que les permitieran la entrada, luego de haber viajado a Haití por las fiestas de Navidad y fin de 2012. La situación llevó al ministro de las Fuerzas Armadas, Sigfrido Pared Pérez, a advertir que el Ejército y los organismos de seguridad impedirán el ingreso forzoso de cualquier extranjero.

La semana pasada, la embajada de Haití en Santo Domingo informó que la Cancillería dominicana le entregó 699 pasaportes con visado de trabajo, de 770 solicitudes que tramitó su representante diplomático, Fritz Cisneas, en enero.

Cineas informó que los gobiernos de Haití y República Dominicana gestionaron los documentos de forma gratuita, para dar salida al impasse en la frontera norte.

Requisitos para visa de trabajador temporero 

•    Formulario de solicitud de visado
    Cuatro fotografías, tamaño 2×2
    Tres copias del pasaporte
    Pasaporte original
    Carta de trabajo, emitida por el empleador
    Fianza de garantía de seguro para cubrir los gastos médicos
    Certificado médico, emitido en el país de origen.
Si la solicitud se hace a través del empleador (régimen de contingente), se agrega un formulario con los datos del migrante, el contrato de trabajo y una resolución del Ministerio de Trabajo mediante la cual ordena el registro de ese contrato
Pero la realidad es que los trabajadores sujetos de regularización ya están en el país.

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