Juan Isidro Inoa
ji2013@hotmail.com
Especial/Noticias A Tiempo
El empresario choferil Gervasio de la Rosa le entregó una placa de reconocimiento al alcalde de Santiago Gilberto Serulle y éste al recibirla se volvió loco prometió regalarle a los choferes el ayuntamiento de Santiago para veinte pesos que buscara prestado.
Al recibir la placa Gilberto le prometió hacerle viviendas, traerle carros nuevos y hacerle una casa club. Todo eso sin contar las millonarias rutas que ya les ha creado y las extensiones de franjas, mientras la cuidad se arropa con la basura.
No entiendo como una administración que se hace llamar socialista le quiere construir viviendas a el único sindicato del mundo donde quienes los dirigen son los empresarios y no los trabajadores. Ya estamos cansados de que a esas gentes (y no a los choferes) les den exoneraciones, combustible, prestamos que no pagan, vehículos y ahora que también le quieran dar viviendas.
Todo con nuestro dinero. Si le construye viviendas los empresarios choferiles se adueñaran y como siempre darán dos o tres para justificar la repartición. Los verdaderos choferes tienen sus casas club por lo que de hacerle una, será para los empresarios del transporte quienes lo convertirán en patrimonio personal.
No entiendo cómo por una placa de reconocimiento sin más valor sentimental que los millonarios beneficios que esta administración le ha dado y para que el alcalde le dé más, provoque un discurso tan emotivo en el alcalde donde ofrece dar la alcaldía más veinte pesos que buscara prestado. Es que quiere más placas? Por lo que sucede, cada santiaguero deberá entregarle una placa al alcalde Serulle para que nos de nuestra parte antes de que le reparta todo a los empresarios del transporte, porque como diría Toño Rosario esos si no juegan “broder”. Ma’ Gueno Quejasí!
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